En los últimos días, la prensa aliada del alcalde ha desatado una campaña de desinformación al proclamar, sin presentar ninguna encuesta o estudio riguroso, que el 80% de la población de Santo Domingo Este está de acuerdo con la instalación de vertederos en furgones. Esta afirmación, difundida sin evidencia alguna, contrasta radicalmente con la reacción ciudadana y las protestas que han obligado a la DIGESETT a convocar tanto a la Alcaldía como al INTRANT para abordar la problemática.
Mientras tanto, no es la primera vez que se manipulan cifras para favorecer a la administración. Recientemente, el comunicador Jaime Rincón difundió una supuesta aprobación del 70% a favor de Dio, basándose en una página que emite “dizque noticias” sin argumentos sólidos ni respaldo institucional. Esta farsa, al igual que la actual maniobra sobre los vertederos, constituye otro ejemplo de cómo la prensa mercenaria se presta para engañar a la población.
Es inaceptable que, en pleno ejercicio del derecho constitucional a recibir información veraz y oportuna, se utilicen medios sin escrúpulos para maquillar la realidad y justificar decisiones arbitrarias. La falta de rigor periodístico y la desinformación que circula solo fomentan la confusión y erosionan la confianza en las instituciones democráticas.
La ciudadanía merece transparencia y compromiso con la verdad, no manipulaciones que distorsionan la realidad y sirven a intereses políticos particulares. Es imprescindible que los organismos reguladores y la sociedad exijan rendición de cuentas a quienes pretenden dictar la opinión pública sin fundamentos ni pruebas. La defensa del derecho a una información honesta es fundamental para preservar la democracia y garantizar que las decisiones públicas se tomen en base a datos reales y no a engaños mercenarios.
